El exlíder del partido socialista español PSOE renunció este sábado a su escaño de diputado en el Congreso disconforme con la decisión de su formación de permitir al conservador Mariano Rajoy ser investido nuevamente como presidente del gobierno.
Desbancado del liderazgo socialista a principios de octubre por una rebelión dentro de su partido, Sánchez compareció horas antes de la investidura de Rajoy para anunciar su renuncia como diputado y dejó entrever su intención de retomar su cargo en el próximo congreso del PSOE.
“Las razones de mi renuncia son bien conocidas. Básicamente, estoy en profundo desacuerdo con facilitar el gobierno de Mariano Rajoy. Como muchos socialistas, mantengo mi +No+ firme y claro”, aseguró en su comparecencia en el Congreso de los diputados.
Pero la gestora que comanda ahora el partido lo colocó en una “encrucijada” al obligar a todos los diputados a abstenerse en la votación que tendrá lugar el sábado alrededor de las 19H45 (17h45 GMT).
“Se entenderá que no puedo fallar a mi partido pero tampoco puedo faltar a mi compromiso con los millones de votantes que confiaron en el PSOE”, dijo con la voz entrecortada de la emoción.
Pedro Sánchez de regreso al PSOE
Esta decisión le da margen para presentarse ante el próximo congreso del partido, donde la militancia, en la que todavía conserva amplios apoyos, deberá escoger una nueva dirección. Pedro Sánchez dejó entrever su intención de presentarse. “Vamos todos juntos a recuperar el PSOE, un PSOE autónomo y alejado del Partido Popular” de Rajoy, dijo.
Elegido secretario general del PSOE en 2014 por la militancia, Pedro Sánchez se oponía firmemente a permitir un nuevo mandato de Rajoy y quería intentar formar un gobierno alternativo, una opción abortada por una rebelión de los críticos de su partido que forzaron su dimisión.
La abstención de una parte de los 85 diputados socialistas permitirá a Rajoy formar un gobierno en minoría y poner fin a diez meses de bloqueo político en España tras la fragmentación generada en diciembre por la irrupción de dos nuevos partidos, Ciudadanos (centroderecha) y Podemos (izquierda radical).
Pero esta decisión provocó una fuerte división en el seno de los socialistas y algunos fieles a Pedro Sánchez prevén votar en contra de Rajoy.