A un mes de que acabe el 2016, Play te lleva por un recorrido de los mejores combates del año, entre los que destaca el duelo en el que el nicaragüense Román “Chocolatito” González venció al mexicano Carlos Cuadras.
¡Cuánto corazón!
Román “Chocolatito” González, empujado por el deseo de hacer historia en busca de su cuarta corona mundial, fue exigido al máximo por un Carlos Cuadras que cruzó la línea del atrevimiento, la noche del 10 de septiembre en el Fórum de Inglewood, en Los Ángeles, Estados Unidos.
La costumbre era ver pelear al nica en la comodidad de su talento; sin embargo, el arquitecto de los pesos pequeños se enfrentó sin descanso con “El Príncipe”, en medio de un ambiente de incertidumbre y emoción. Ataques iban y venían, sin cobardía. Román terminó con los ojos hinchados, como nunca le había ocurrido. Fue una batalla sin cuartel, en la que González conquistó el título de las 115 libras del CMB, su cuarto en divisiones distintas.
Dos gladiadores
Antes del combate, Francisco Vargas y Orlando Salido habían prometido una guerra. La noche del 4 de junio en el StubHub Center en Carson, California, Estados Unidos, los mexicanos pelearon a un ritmo infernal, hubo cortes, sangre, cansancio, valentía y los 12 rounds se convirtieron en 36 minutos de puro golpeo.
Al final la pelea fue declarada empate, lo que pareció un fallo justo. Vargas conservó el cinturón de las 130 libras del CMB. Salido hirió a Vargas en su ceja izquierda, pero el campeón resistió, y con un segundo aire emparejó las acciones.
Una de antología
Una jugada maestra y un resultado inesperado. El retador botó del banquillo al campeón. Carl Frampton venció a Leo Santa Cruz la noche del 30 de julio en el Barclays Center, Nueva York, Estados Unidos, para despojarle del título y romperle el invicto.
Los dos primeros rounds insinuaron la sorpresa. Aún permanece congelada la escena en la que Santa Cruz encuentra soporte en las cuerdas después de un cruzado zurdo conectado por Frampton, quien se aferró a la victoria, aun cuando tenía menor alcance y pegada. Sin embargo, el ánimo del mexicano de no dejarse vencer, llevó a una gran pelea.
Solo ráfagas
Keith Thurman y Shawn Porter volvieron a encandilar el boxeo. Al filo de las 147 libras, los estadounidenses ofrecieron un recital de la más alta calidad en el Barclays Center, en Nueva York, Estados Unidos, el pasado 25 de junio.
Ráfagas, velocidad en doble vía, dos cuerpos al borde de la lona por el castigo enemigo, le imprimieron a este pleito la adrenalina necesaria, que alimentó a una afición que respondió con halagos, aplausos y excitación. Thurman protegió su invicto sobre Porter, al ser declarado vencedor por decisión unánime con puntuaciones de 115-113.