Conseguir un poco de agua potable en las comunidades del Corredor Seco de Nicaragua es casi una odisea, la escasez del vital líquido en esta zona del país obliga a las personas a consumir agua de pozos comunales y ríos con alto grado de contaminación. Es por ello que desde hace un año se ejecuta el programa Agua Limpia para los Niños que le ha cambiado la vida a 1,500 personas de zonas rurales.
El programa que es financiado por una empresa privada y es ejecutado por la Fundación Padre Fabretto en las comunidades de Madriz y Nueva Segovia, la iniciativa consiste en entregar a las familias de las zonas rurales los sobres Purificador de Agua”, que funcionan como una pequeña planta de tratamiento de agua, que transforma agua sucia y contaminada en agua limpia para beber.
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“Hemos logrado asegurar la salud de más de 350 familias rurales de los departamentos de Madriz y Nueva Segovia, ustedes saben que en el Corredor Seco hay una gran escasez de agua limpia, hay un problema que pone su salud y su vida en riesgo, el programa a logrado salvar vidas de niños y niñas que hoy tienen acceso a agua limpia”, dijo Kevin Marinacci, director ejecutivo de Fabretto.
Por su parte la representante de la empresa donante, Rhina Álvarez, destacó : “Beber agua potable es algo que muchos de nosotros ni nos damos cuenta que estamos haciendo en nuestro día a día, pero es un reto diario para muchas familias en todo el mundo”.
¡El agua contaminada mata!
Según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) “el agua de bebida contaminada causa más de 500,000 muertes anuales por diarrea y es uno de los principales factores que contribuyen a varias enfermedades tropicales desatendidas, como las parasitosis intestinales, la esquistosomiasis o el tracoma».
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Recientemente la responsable de programas de Ingeniería para el Desarrollo (Ongawa), Margarita Gutiérrez, dijo a LA PRENSA que en las zonas rurales de Nicaragua las familias caminan largas distancias en busca del agua para el día, la mayoría de las veces el recurso que consiguen es de mala calidad, contaminado con coliformes fecales o arsénico, lo que afecta su salud.
Asimismo la directora regional de la Cooperación Suiza en América Central (Cosude), Edita Vokral, quien citó al Banco Mundial, estimó que la falta de agua y saneamiento, provoca gastos de nueve millones de dólares al año al país, y en gastos de salud ascienden a 70 millones de dólares al año.