En Costa Rica hay alrededor de 500 nicaragüenses refugiados y solo este año 27 personas más han solicitado ese beneficio, a pesar de que Nicaragua no vive una guerra como en la década del ochenta, no alcanza los niveles de inseguridad de sus países vecinos y tampoco tiene crisis de alimentos, como en Venezuela.
Según la directora de Migración y Extranjería, Gisela Yockchen, aunque Nicaragua no tiene los escenarios iguales a los antes descritos, las personas solicitantes y beneficiarias de refugio no están exentas de persecución o violencia.
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“Casualmente porque el refugio es una medida de protección a la vida, la situación de Nicaragua, a pesar de que la política sea diferente, no implica que ellos vivan violencia extrema o situaciones de persecución”, explicó Yockchen a LA PRENSA.
“Los porcentajes de solicitudes de refugio de personas nicaragüenses siempre han sido muy bajas, en los años ochenta se dio el tema de la guerra civil, entonces pudo haber tenido una incidencia más importante, pero en general siempre ha sido el 1 por ciento de todas la solicitudes” en Costa Rica, añadió.
El caso de Zoilamérica Ortega Murillo
El caso más sonado sobre refugio nicaragüense en Costa Rica durante los últimos años es el de Zoilamérica Ortega Murillo, la hijastra de Daniel Ortega, que lo acusó, en 1998, de violación y que fue expulsada de Nicaragua por el Gobierno que este comparte con su madre, Rosario Murillo.
El boliviano Carlos Ariñez Castel, su esposo, fue detenido y expulsado por el gobierno de Ortega en junio del 2013, alegando haber infringido la Ley de Migración nicaragüense.
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En ese tiempo Zoilamérica dijo que su madre, la entonces primera dama y ahora vicepresidenta, Rosario Murillo, le comunicó telefónicamente que expulsaron a su marido luego de cuatro años de vivir en Nicaragua, en represalia por el apoyo que ella y Ariñez Castel brindaron a los ancianos que protestaban contra el Gobierno en demanda de una pensión reducida.
Zoilamérica y su familia llegaron a Costa Rica ese año, donde vive como refugiada.
Los refugiados, según Acnur
Según datos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), el número de solicitudes de refugio en este país pasó de 1,384 personas en 2014 a 4,470 en 2016.
Este año las gestiones entre enero y mayo fueron 2,582, incluidos los 27 nicaragüenses. La mayoría de solicitantes provienen de Venezuela (1,036), El Salvador (761), Colombia (338), Cuba (135) y Honduras (107).
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“Realmente hemos tenido un incremento importante a partir del 2015 de nacionales de El Salvador y Venezuela por situación política, económica y social que vive cada uno de los países en diferentes contextos”, explicó Yockchen.
Venezuela y El Salvador
“Venezuela tiene conflictos políticos y es muy normal que estos sean motivos expulsores de un país, que las personas empiecen a tomar decisiones de migrar y algunos con connotación de refugiado”, dijo la directora de Migración y Extranjería, Gisela Yockchen.
En el caso de El Salvador, este país tiene violencia e inseguridad y las personas piden refugio porque son perseguidas por una pandilla, por una mara”, explicó Yockchen.
