El movimiento de carga terrestre y acuática ha despuntado en los últimos años, lo que conlleva nuevos desafíos para el sector.
Las estadísticas oficiales indican que en 2016 la carga acuática internacional aumentó 2.57 por ciento, mientras que el movimiento de carga terrestre empujó el crecimiento de la actividad de transporte y comunicaciones.
“El valor agregado de la actividad de transporte y comunicaciones creció 4.2 por ciento (0.2 pp de aporte al crecimiento), con aumentos especialmente en transporte terrestre de pasajeros y carga, y en los servicios de telecomunicaciones y cable”, revela el informe anual 2016, publicado por el Banco Central de Nicaragua.
Marvin Altamirano, presidente de la Asociación de Transportistas Nicaragüenses (ATN), sin embargo, afirma que la demanda de transporte de carga no es suficiente para la creciente oferta de la flota vehicular.
La ATN tiene registrados alrededor de ochenta mil vehículos de carga a nivel nacional, de ocho toneladas a más. Pero la demanda actual requiere apenas de unos sesenta mil a setenta mil vehículos, lo que pone en aprietos a los transportistas terrestres. “Hemos crecido, hemos crecido en unidades, en mejorar la flota, en la calidad de la flota”, menciona Altamirano.
Adicionalmente, con el incremento de la carga y sobreoferta de transporte, el sector enfrenta limitaciones en la infraestructura vial, que ha mejorado pero no ha crecido.
“Eso en cierta manera es un obstáculo porque ha crecido el parque vehicular, entonces las mismas carreteras no son suficientes para el desplace de mercancías, hay atrasos. Y eso no es solo en Nicaragua, es en toda Centroamérica, aunque en algunos países han crecido más pero en toda Centroamérica la infraestructura sigue siendo la misma”, señaló Altamirano.
Comercio intrarregional con dificultades
Esta situación ha provocado que los vehículos necesiten más tiempo para llegar con las mercancías hasta su destino, pero el mayor retraso se da por los atrasos en las fronteras, afirmó el presidente de la ATN, quien espera que sea resuelto conforme avance la unión aduanera regional.
Peñas Blancas, el principal paso de mercancías por vía terrestre, no está exento de la realidad centroamericana que presenta aún dificultades para mejorar el comercio intrarregional, a pesar de los esfuerzos de los gobiernos, opina Francisco Quirós, director ejecutivo de la Cámara Nacional de Transportistas de Carga (Canatrac) de Costa Rica.
“El comercio en la región ha crecido durante los últimos veinte años, no así la infraestructura tanto en instalaciones como en carreteras para atender la demanda creciente, lo cual crea congestionamiento en el paso”, opina Quirós.
Atascos en la frontera
Según el director ejecutivo de Canatrac, la atención a camioneros en cada una de las aduanas de Peñas Blancas (tanto de Nicaragua como de Costa Rica), es relativamente ágil porque dura unos 15 minutos. No obstante, las congestiones se forman cuando algún sistema informático falla, además de la falta de red vial para agilizar el tránsito, lo que provoca filas de hasta ocho kilómetros de furgones, en el peor de los casos.
Si bien es cierto que Nicaragua tiene una excelente red vial en el interior de su territorio, en su frontera con Costa Rica queda debiendo, añade el director ejecutivo de Canatrac, lo que dificulta el ingreso y salida de los transportistas de carga desde este país.
El cuello de botella se genera entre el puesto migratorio de Nicaragua y el sector de la aguja, donde hay un solo carril, según Quirós, lo que dificulta el flujo de vehículos.
En ese sentido, el director ejecutivo de Canatrac urgió no solo al Gobierno de Nicaragua sino también al de Costa Rica, a mejorar la infraestructura, puestos de atención, mayor personal y un horario de atención de 24 horas.
“En todo nuestro canal logístico centroamericano los pasos de frontera son un verdadero dolor de cabeza, muy complicado y tienen que hacerse esfuerzos máximos para mejorar porque en todos los países tenemos cola”, expuso.
“También tenemos problemas de interpretación entre una frontera y otra del reglamento de tránsito internacional de mercancías. Hay esfuerzos entre Guatemala y Honduras con un plan piloto para agilizar el paso, habrá que ver cómo funciona y si ayuda a mejorar el paso”, añadió.
Nicaragua sufre por costos de seguridad
- El problema de inseguridad para el tránsito de mercancías en el triángulo norte incrementa los costos para los transportistas nicaragüenses, se queja Marvin Altamirano, presidente de la ATN.
- “En Guatemala, El Salvador y Honduras la mercancía con cierto valor lleva doble custodia, no se puede viajar solo; solo se puede viajar de día, normalmente se viaja en convoy, que va una custodia adelante y otra custodia atrás y los costos a veces son altos (…) Creemos que los nicaragüenses hemos tenido que pagar las consecuencias por estas cosas que se dan en Guatemala, Honduras y El Salvador”, explicó.
- “Nicaragua está sintiendo el incremento de estas custodias por la falta de seguridad en esos países, porque aquí realmente no hay custodia armada para ninguna mercancía, lo que se hace es prever el caso y no caminar de noche, no arriesgarse mucho pero sí Nicaragua puede circular cualquier mercancía libremente”, añade.
- La “doble custodia” incrementa los costos de traslado entre 500 y 1,500 dólares”, informó el presidente de la ATN.
