Mohamed Salah aportó dos goles, incluido uno de penal en los descuentos, para que Egipto se instalara en la Copa del Mundo, algo que no había conseguido en 27 años, al superar ayer 2-1 a República del Congo.
Salah, delantero del Liverpool inglés, inauguró el marcador a los 63 minutos, cuando aprovechó un pase que le filtró Mohamed Elneny, volante del Arsenal. Pero Arnold Bouka Mouto, quien ingresó como sustituto, empató a los 86, por medio de un potente zurdazo que sorprendió al arquero Essam el-Hadari.
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Parecía que Egipto tendría que esperar a la última fecha de la eliminatoria africana para visar su boleto. Sin embargo, el sustituto Mahmoud Hassan fue derribado dentro del área al segundo minuto de los descuentos.
Salah convirtió de zurda y aseguró la presencia de los egipcios el próximo año en Rusia. El final dramático desató la celebración de los 30.000 espectadores reunidos en un estadio militar en el puerto mediterráneo de Alejandría.
Egipto solo había participado en los mundiales de Italia de 1934 y 1990.