José “Quiebra Jícara” Alfaro a sus 33 años ha tomado un segundo aire. “¿Me retiro o no me retiro?” era su dilema hasta que decidió relanzar su carrera. Pelea este viernes en Malpaisillo contra el peruano Reno “Jaguar” Reyes (7-0-1), pero más allá de ese combate el cual considera “sencillo en teoría”, piensa colgar los guantes una vez que tenga otra oportunidad titular: “Pienso estar máximo dos años más”, dice el excampeón mundial con su característica elocuencia.
Alfaro peleará en las 143 libras. Su principal motivo para seguir es que detrás del televisor ve un bajo nivel del cual puede aprovechar. “Veo que tengo chance cuando miro las peleas de los campeones y me doy cuenta que yo puedo ganarles. Los campeones actuales no hacen muchas defensas, son muy cambiantes”, explica. “Quiebra Jícara” cree poder establecerse en las 140 libras en futuras reyertas.
Cuando el excampeón habla denota seriedad en sus palabras, ahora resta que su cuerpo le responda. “No necesito estar ranqueado porque soy excampeón, eso facilita las cosas”, menciona. No obstante, Alfaro primero deberá vencer a Reyes. “No lo he visto pelear, me han dicho que es más pequeño que yo y que no debe sorprenderme. Yo tengo la pegada suficiente para que el combate no se alargue”, asegura el excampeón.
Un excampeón diferente
“Quiebra Jícara” es de los pocos excampeones mundiales que ha manejado bien su dinero. Aunque no ganó grandes bolsas dice que si quiere se retira del boxeo ahora mismo y puede seguir teniendo una vida sin lujos pero cómoda. “Puedo vivir tranquilo. Tengo mi casa, mi carro y mi tramo en el mercado Oriental. Sin embargo, siento que puedo dar algo más”, concluye el boxeador que será recordado por haber tenido una de las peleas más impactantes del boxeo nacional contra Santos “El Toro” Benavides.