“El mensaje que yo les envío a los padres de familias es que les inculquen a sus hijos el amor por nuestras costumbres y tradiciones”, manifestó el año pasado doña Maritza Ñamendy, durante el desfile del torovenado “caminitos de gloria”. Este miércoles falleció después de estar en cama a causa de una enfermedad.
Ñamendy fue reconocida como una folclorista, que acostumbraba a participar en las diferentes actividades culturales y religiosas que se realizaban en su tierra natal Masaya. Este miércoleslos filarmónicos callaron y los disfraces se guardaron, para acompañar a la familia doliente en la despedida de doña Maritza.
“Ella falleció como a las diez y cuarenta minutos de la mañana (de este miércoles), ella cayó en cama desde el 6 de octubre, por eso este año no salió el torovenado. Mi mamá siempre fue muy alegre, trabajadora, no tenía horas ni días de descanso. Ella era ferviente devota de San Jerónimo y de la Virgen, fue muy católica, incansable para conservar todas las culturas. Si ella se daba cuenta de alguna actividad, siempre buscaba como ir a apoyar”, dijo entre lágrimas María José González Ñamendy, hija de doña Maritza.
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Sus familiares aseguraron que siempre apoyó a la cofradía de San Miguel, también se involucró en las actividades de El Señor de los Milagros, carretas peregrinas, San Jerónimo y por supuesto el torovenado “caminitos de gloria”, que era uno de los primeros que salía durante las fiestas patronales de San Jerónimo, cuyo legado cumplió cuarenta años desde que sus progenitores se lo heredaron.
Este jueves se celebrará misa de cuerpo presente en la parroquia El Socorro de la comunidad La Garza, carretera Masaya-Granada, porque es la zona en donde doña Maritza Ñamendy tenía su finca.
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Posteriormente, a las 3:00 p.m. será sepultada en el Cementerio San Javier de ese mismo poblado.