La única medalla de oro en billar que se consiguió ayer fue a través de Ernesto Blanco y Francisco Taylor, quienes dominaron en carambola a Erick Téllez y Alan Marín, representantes de Costa Rica, con un global de 78-69.
Blanco aseguró el oro al ser tan efectivo como un tecladista frente a Marín, ante el que cultivó un amplio margen de 40-29, mientras que Taylor debatía con argumentos con Téllez, al que el veterano jugador nicaragüense califica de “excelente”, y el 40-38 final a favor del tico dice mucho de lo ajustada que estuvo la partida.
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“Esto es gracias al esfuerzo, al entrenamiento, y me siento complacido de haber puesto arriba a mi equipo, ya que era duro que Taylor le ganara a Téllez, la obligación estaba en mí y cumplí”, dijo Blanco.
Karen fue frenada
En tanto, el festejo no alcanzó a Karen García, la que se encontró con el tormento en bola 10, precisamente en la final con la costarricense Adriana Villar, la que viniendo desde abajo (1-3) se metió en una burbuja de concentración y sentenció la partida (8-3), quedándose ella con el oro y García con la plata.
“Fallé mucho”, reflexionó Karen, un tanto abatida, porque se imaginaba el segundo oro, después de arrebatar el primero en bola 8, el martes pasado.
“Indiscutiblemente estaba a la par de una gran jugadora, estuve enfocada y no desaproveché la oportunidad”, declaró Villar.
En esta competencia, la nicaragüense Meyling Balladares se apoderó de la medalla de bronce.
En masculino, Marcos García, hermano de Karen, ganó otro bronce en bola 10, al perder (6-9) en ronda semifinales con el panameño Joel Rodríguez, quien posteriormente se colgó la medalla de oro al dominar (9-5) al guatemalteco Luis Lemus.