2017 fue un año en que la Alcaldía de Managua:
- Desarrolló una infraestructura deportiva sin precedentes
- Mantuvo el ornato de la ciudad y
- Avanzó en la revitalización del antiguo centro, perdido con el terremoto de 1972
Pero ignoró el serio problema de:
- Las inundaciones al no destinar fondos para disminuirlas
- No mejoró el funcionamiento de los semáforos inteligentes y
- Repitió la tónica de que el secretario general mandó más que la alcaldesa y vicealcalde.
El saliente concejal del Partido Liberal Independiente (PLI), Omar Lola, explicó que los puntos a favor son merecedores de aplaudir pero aclara que estos quedan empañados por los tres negativos, al ser vitales para la capital y su desarrollo.
“La vulnerabilidad de Managua creo que va a continuar mientras no exista conciencia por parte de las autoridades, en el caso de los semáforos inteligentes creo que todavía hay tiempo para mejorarlos porque todavía está el plazo del mantenimiento (por parte de la empresa) y respecto a las funciones del alcalde y vicealcalde van a continuar limitados por el simple hecho que en junio de 2009 el Concejo Municipal, en contubernio con el secretario general de la comuna (Fidel Moreno), autorizaron cercenarle la autoridad administrativa al entonces alcalde de Managua Alexis Argüello”, argumentó Lola.
Bajo este panorama el próximo 10 de enero Reyna Rueda recibirá las llaves de la municipalidad con miras a entregarlas en 2022, cuando termine su periodo administrativo.
Visible crecimiento en instalaciones
Ante el compromiso de albergar los XI Juegos Centroamericanos, entre el 3 y el 17 de diciembre, con apoyo del Gobierno central la Alcaldía construyó importantes y vistosas instalaciones deportivas. El estadio nacional de beisbol Dennis Martínez, polideportivo Alexis Argüello y el complejo de piscinas, fueron los escenarios más importantes.
Solo el parque de pelota tuvo una inversión de 36 millones de dólares, el polideportivo 15 millones de dólares y las piscinas 5.6 millones de dólares.