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Daniel Ortega (i) hizo que Nicaragua no votara a favor de la Venezuela de Nicolás Maduro (c) en la última sesión extraordinaria de la OEA. Es la primera vez que ocurre desde 2007. LA PRENSA / Agencias.

Daniel Ortega (i) hizo que Nicaragua no votara a favor de la Venezuela de Nicolás Maduro (c) en la última sesión extraordinaria de la OEA. Es la primera vez que ocurre desde 2007. LA PRENSA / Agencias.

Daniel Ortega cambió la seña en la OEA

El hecho concreto es que el voto de Nicaragua fue registrado como abstención, la primera posición de este tipo que Daniel Ortega toma desde 2007.

El intento del Gobierno de Nicaragua de justificar la abstención como “rechazo” en la votación por el caso de Venezuela en la OEA revela un “cambio de criterio”, dijeron especialistas.
Según el exembajador Carlos Tünnermann Bernheim, fue por presiones que el gobierno nicaragüense salió posteriormente en respaldo de su aliado después que decidió abstenerse durante la votación.

La sesión extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA) concluyó el viernes con una resolución desfavorable al régimen de Nicolás Maduro, aliado político de Daniel Ortega.

Les informan agenda

El exdiplomático explica que, cuando son convocadas las reuniones del consejo permanente de la OEA, a los representantes de los países se les envía la agenda y ellos se hacen un juicio sobre si el tema que se tratará es de competencia del organismo.

Fue la primera vez desde junio de 2017 que el tema de la crisis de Venezuela fue abordado en el seno de la OEA, de acuerdo con el canciller de México, Luis Videgaray.


Lea también: Daniel Ortega da la espalda a Nicolás Maduro en la OEA


La resolución del viernes exhortó a Venezuela a que no realice elecciones presidenciales en abril próximo, tal como quiere el chavismo, que promueve la reelección de Maduro, el actual gobernante.

La decisión del organismo internacional fue tomada por 19 países y llamó la atención el caso de Nicaragua, al mando de Ortega, un incondicional de ese país desde los años de gobierno de Hugo Chávez.

El caudillo sandinista decidió abstenerse, a diferencia de Bolivia —otro de los países del Alba—, que sí rechazó el documento.

Alvarado Nervioso

Después de la votación, el representante de Nicaragua ante la OEA, Luis Alvarado, visiblemente nervioso, adujo que el país no podía aceptar la convocatoria de la sesión.

“Nicaragua quiere expresar de manera categórica y quiere dejar claramente sentado su rechazo total y desacuerdo con la convocatoria y la resolución presentada, por lo que desconoce todo lo que se ha actuado”, dijo entonces.

El hecho concreto, sin embargo, es que el voto de Nicaragua fue registrado como abstención, la primera posición de este tipo que Ortega toma desde que asumió el poder en 2007.

“Lo procedente es que lo diga al principio: que es ilegal lo que se acuerde y se retira. No lo hizo, se quedó durante toda la reunión, participó en la votación con la abstención, después puede haber recibido una llamada de Nicaragua, porque el Gobierno cambió de opinión o tal vez haya sido que hubo presión o un llamado de atención de Venezuela. Lo cierto es que lo hizo hasta el final para justificar su abstención”, dijo Tünnermann.

Venezuela: “Respetamos”

El representante de Venezuela en la OEA, Samuel Moncada, dijo el viernes a la agencia de noticias AFP que eran muy respetuosos de la decisión de cada país sobre cómo votar.

Al final la resolución fue aprobada con el voto de 19 países, 5 naciones votaron en contra, ocho se abstuvieron (entre estas Nicaragua, El Salvador y Ecuador) y dos países estuvieron ausentes.

“Hay muchos problemas en la región y respetamos a los países que se dedican a resolver sus problemas internos”, sostuvo Moncada en una conferencia de prensa.

Tünnermann destacó que es probable que la decisión inicial de Nicaragua —el voto por la abstención— se deba a que está de por medio la posición de Estados Unidos solicitando a los países de la región que contribuyan con su esfuerzo a la recuperación de la democracia en Venezuela.

Factor Nica Act

Sin embargo, se sepulta el esfuerzo después de que el Gobierno clamó al final de la sesión un respaldo incondicional a Maduro a través de Alvarado, lo que también ratificó después en un comunicado oficial el Ejecutivo, leído por la vicepresidenta designada Rosario Murillo.

“Probablemente esa abstención se haya debido a que, en un momento dado, Ortega creyó que absteniéndose eso podía tomarse en cuenta y detener de esa manera la Nica Act, pero con el cambio que hizo, en el cual reiteró su solidaridad a Venezuela, antepuso sus intereses personales a los intereses de la nación”, añadió el exembajador.

Lea además: Las claves para entender qué es la Nica Act

“Lo procedente es que lo diga al principio: que es ilegal lo que se acuerde y se retira. No lo hizo, se quedó durante toda la reunión, participó en la votación con la abstención”. Carlos Tünnermann, exembajador.

Está en el Senado de EE.UU.

La Ley Nica Act se encuentra actualmente en el Senado y, de aprobarse, obligaría a que representantes en organismos multilaterales, del Gobierno de Estados Unidos, no voten a favor de las solicitudes de préstamos de Nicaragua, en tanto no haya mejoría en la situación democrática del país.

Para el excanciller Norman Caldera, es muy difícil entender las razones de Nicaragua en esta votación, pero sostiene que la consecuencia de que se haya aprobado una resolución contra Venezuela es que se reduce el número de países que Nicaragua tendría a su favor en el futuro para bloquear cualquier resolución en contra del país centroamericano.
“Es muy difícil saber lo que pasó ahí”, dijo.

De acuerdo con el exministro de Relaciones Exteriores nicaragüense, existen varios tipos de votación en este tipo de foros: a favor, en contra, la abstención y la ausencia. Cada una, explica el excanciller, tiene una lectura distinta. (Ver infografía)

Lea la entrevista – José Luis Velásquez: “Ortega ganó tiempo y OEA perdió integridad”

Viene boicot a Cumbre

El exembajador de Nicaragua ante la OEA, José Luis Velásquez, calificó como una “abstención razonada” la posición del país.

Conforme a Velásquez, el país no le está dando la espalda a su aliado, sino que este voto forma parte de una estrategia, en la cual el gobierno de Ortega intenta lucir distante tanto del bando que cuestiona a Maduro, así como de quien lo respalda.

“Eso le permite jugar como árbitro en el gran bochinche que se viene. Lo que están gestando para la Cumbre con la llegada a Perú de Maduro llueve, truene o relampaguee. Es hacer un enorme boicot contra la Cumbre americana. Entonces ya están puestas ahí las jugadas: El objetivo es que no haya en la Cumbre ninguna resolución contra Venezuela, es neutralizarla”, aseguró.

Igual fue con Somoza

Velásquez dijo que el argumento usado por Nicaragua para expresar su respaldo a Maduro es similar al de los países que se opusieron a aprobar una resolución contra Anastasio Somoza Debayle, después del asesinato del periodista Bill Stewart, en 1979.

Narró que en esos años el consejo permanente de la OEA convocó a una reunión de cancilleres para analizar el caso de Nicaragua. Algunos objetaron la resolución que pidió la renuncia del dictador.

“La resolución se vota y la aprueban por mayoría. El argumento que hacen los países que se abstienen es decir que el consejo permanente de la OEA no tiene facultades; que no hay legislación en la OEA que autorice a pedir la renuncia de un jefe de Estado”, añadió Velásquez, haciendo la analogía con la posición actual de Nicaragua.


La Cumbre americana

El próximo 13 y 14 de abril Perú será la sede de la Cumbre de las Américas. El Gobierno de este país decidió retirar el pasado 16 de febrero la invitación al gobernante de Venezuela, Nicolás Maduro, argumentando que cualquier ruptura del orden democrático de un Estado del hemisferio constituye un obstáculo insuperable para la participación de dicho Gobierno en la Cumbre. El líder chavista respondió con que llegaría a Lima, la capital peruana, lloviera, tronara o relampagueara. Ortega abogó el 21 de febrero pasado por que se le levantara este veto a Maduro.


 

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