El general en retiro y opositor Hugo Torres dijo que la participación del presidente designado de Nicaragua, Daniel Ortega, en la XV Cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba-TCP) fue para “no despertar dudas de su firmeza con el régimen dictatorial de Nicolás Maduro”.
Un segundo mensaje, según Torres, es para “no mostrarse débil ante los Estados Unidos” ante las presiones que le hacen a Ortega para que haya reformas institucionales, partiendo de garantizar elecciones transparentes en Nicaragua.
“Fue un espaldarazo a las elecciones ilegales que Maduro impuso para aferrarse al poder (…). Queda muy bien en el club Alba, donde Ortega se siente a gusto, pero el costo es que frente a sus adversarios muestra su esencia, queda en evidencia de que no tiene el menor propósito de cambiar y por el contrario lo que hará es fortalecer su propio régimen dictatorial negando el derecho de los nicaragüenses a elegir libremente a sus gobernantes”, dijo Torres.
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Rechazo a Maduro
Venezuela celebrará en mayo elecciones presidenciales adelantadas, en las que Maduro busca reelegirse, lo cual es rechazado a nivel internacional, ya que se le señala a ese Gobierno de corrupto, violador de derechos humanos y de querer imponer una dictadura.
Mauricio Díaz, exembajador de Nicaragua en Costa Rica, también ve como “una mala señal” que el presidente Ortega “se aferre al modelo chavista que ya demostró ser inviable y que aquí en Nicaragua lo único que nos ha producido son luces de arcoíris”, dijo.
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Solidarios solo de palabra
La XV Cumbre del Alba se realizó el 5 de marzo en Caracas y en su declaratoria final se rechazó las sanciones de Estados Unidos a altos funcionarios y al propio presidente Nicolás Maduro. Además se condenó la exclusión de Maduro a la Cumbre de las Américas en Perú, en abril próximo.
Hugo Torres, general en retiro, cuestionó que el Grupo Alba pudo tomar otra resolución que fuera más allá de la solidaridad con Maduro.
Según Torres, por ejemplo, se pudo condicionar la participación del resto de los mandatarios del Alba a la Cumbre de las Américas, pero, según el político opositor, esa medida hubiera significado “arriesgarse a sufrir también el aislamiento” y enfrentar represalias comerciales del resto de países de la región.
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Para Torres y el exembajador Mauricio Díaz fue un error que Daniel Ortega se sumara a la “confrontación” del Alba.