La escasez de agua empieza a sentirse en varios barrios de la ciudad de Ocotal, cabecera departamental de Nueva Segovia, en la medida que el verano se profundiza.
Normalmente el servicio de agua potable en Ocotal es garantizado 24 horas día de por medio, pero desde hace dos semanas el agua llega hasta después del mediodía a los hogares de la zona baja (donde el servicio es más eficiente por su ubicación geográfica), brindando un servicio de 12 horas y día de por medio.
En la zona periférica y alta la situación es más compleja y la escasez se siente con mayor rigurosidad, debido a que apenas llega el agua a los grifos unas cuantas horas día de por medio. En lugares como el hospital, la Casa Materna, la Policía Nacional y los dos mercados la Alcaldía garantiza periódicamente el agua desde el río Mozonte a través de cisternas.
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Los ciudadanos del barrio Tomás Borges, ubicado al noroeste de Ocotal, señalan que el problema es que los encargados de abrir las válvulas el día que les corresponde abastecimiento de agua, no llegan y en casos extremos han tenido que pedir a la Alcaldía que los abastezca de agua con la cisterna.
Revelaron que en Semana Santa tuvieron agua hasta el sábado por la tarde, y “ni tiempo de lavar toda la ropa nos dio”, dijo una señora que consideró obligatorio economizar el agua que les lleva la cisterna y que la almacenan en las pilas individuales.
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La señora llamó la atención de que sin garantizar un eficiente servicio de agua potable desde hace dos meses, “los recibos llegan puntuales y con una tarifa muy elevada, eso no es justo, nos dicen que el río está corto de agua, pero siempre es lo mismo en verano, y no vemos ninguna solución”.
Clamor de usuarios
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Para los pobladores del barrio Tomás Borges, la escasez de agua es provocada por el exagerado uso que hacen del recurso las personas que construyen adobe en esta temporada y que “al final ni pagan el agua y afectan a todo el barrio”. “Es injusto, espero que se pongan la mano en la conciencia y que Enacal regule, porque pueden hacer sus adobes cuando el agua la tengamos en abundancia, pero ahora piensen en la cantidad de personas que están a secas en sus hogares”, insistió una de las pobladoras.