Desde inicios de 1900 hay registros de desfiles escolares, pero fue en 1957 que el entonces presidente, Luis Somoza Debayle, decretó la Semana de la Patria en Nicaragua, en conmemoración a la Batalla de San Jacinto y la independencia de Centroamérica de la Corona española.
Estos desfiles escolares en honor a las efemérides patrias, 14 y 15 de septiembre, han evolucionado en el tiempo. Las celebraciones se remontan después de 1856, cuando se libró la Batalla de San Jacinto y al inicio solo se hacía a nivel del Ejército, en ese entonces liderado por el militar y héroe nacional José Dolores Estrada, de acuerdo con el historiador Bayardo Cuadra.
Antes del decreto de la Semana Patria, se institucionalizó la Promesa a la Bandera Nacional el 27 de agosto de 1941. El reglamento presidencial orientaba que se debía leer en los actos centrales y en todas las escuelas del país para conmemorar la gesta heroica de la Batalla de San Jacinto y para jurar lealtad a la Bandera Nacional y a la Patria. Hasta la fecha algunos colegios lo continúan haciendo.
En los departamentos y la capital del país, los estadios o plazas públicas han sido los sitios donde se reúnen los estudiantes y autoridades para iniciar el desfile que es precedido por un acto alusivo a las fechas que se conmemoran.
En septiembre de 1979 el FSLN abolió las Fiestas Patrias, las sustituyó con la Jornada Pancasán y por medio de un decreto ejecutivo impuso una promesa partidista, equiparó la bandera rojinegra con la bandera azul y blanco de la Patria y obligó a todos los estudiantes a jurar lealtad a la revolución sandinista. Por eso decían: “La Patria, la revolución”, de acuerdo con una publicación editorial de LA PRENSA de 14 de septiembre de 2005.
De unos años a la fecha son bandas rítmicas y las entrenan profesores de danza. En la foto (arriba) el Colegio Calasanz de Managua, era el año 1979. Los estudiantes además de cargar la Bandera de Nicaragua, en el centro, llevan la roja y negra del FSLN, son acompañados por dos milicianos armados.
En septiembre de 1990 el gobierno de Violeta Barrios de Chamorro derogó el decreto de 1979 y aprobó el Decreto Legislativo 50-90: “Que la promesa a la Bandera sintetiza ese sentimiento eminentemente patriótico y nacional, dentro del cual no tiene cabida ningún concepto partidario que pueda menoscabar en forma alguna la manifestación soberana de lealtad a ese símbolo patrio que comprende a todos los nicaragüenses”, dice textualmente el inciso dos de la Promesa a la Bandera.
(Arriba) en la imagen, el entonces presidente de Nicaragua, Enrique Bolaños, preside las Fiestas Patrias en la desaparecida Concha Acústica en el Malecón de Managua, 14 de septiembre de 2006.
Desde que Daniel Ortega volvió al poder en 2007 las celebraciones patrias volvieron a tener un tono partidario con abundantes banderas rojo y negro prevaleciendo sobre la azul y blanco. Además los colegios públicos a través de mantas se han presentado como “Colegios del poder ciudadano” y han llevado lemas oficialistas como “Cristiano, socialista y solidario”.
Las celebraciones patrias incluyen el recorrido de la Antorcha que llega a cada país centroamericano, como símbolo de libertad. Es cargada y trasladada por un maratón de estudiantes de cada país, en su mayoría excelencias académicas. La antorcha es recibida por autoridades de Gobierno y de Educación. En la foto (Arriba), 11 de septiembre de 2009, Daniel Ortega recibe la Antorcha del expresidente hondureño Manuel Zelaya en un acto realizado en la Hacienda San Jacinto.