Juana María Marín Treminio, de 31 años, acusada de parricidio en perjuicio de su pareja, Elvin William López Rivera, debe cumplir con la medida cautelar de prisión preventiva que este lunes le impuso una juez en Matagalpa, quien programó la audiencia inicial del proceso para el 20 de noviembre próximo.
Rivera, de 39 años, murió por una hemorragia masiva tras recibir una cuchillada en el pecho que le afectó el pulmón izquierdo y el corazón, asestada presuntamente por Marín, la madrugada del viernes 9 de noviembre, cuando ambos tomaban licor y pelearon en el barrio El Papalote de la ciudad de Sébaco.
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Sin embargo, la mujer dijo después de la audiencia preliminar que el hombre la golpeaba con frecuencia y que esa noche forcejeó con él, pero que “ese cuchillo no sé de dónde apareció, a lo mejor él lo andaba… pero no sé si fui yo o fue él mismo”.
Según la acusación sostenida por el fiscal auxiliar, Dimas Cerna Lira, la pareja sostenía una relación de hecho estable, pero la noche del 8 de noviembre, cuando estaban tomando licor en la casa de su vecina, Teresa de Jesús Loáisiga López, discutieron porque Marín reclamó que su pareja no le había dado dinero para comprar leche a la hija de ambos, de 11 meses.
Juez admite la acusación
La titular del Juzgado Único de Distrito Penal de Audiencias en Matagalpa, Maribel Parrilla, admitió la acusación del Ministerio Público y decretó la medida cautelar de prisión preventiva en contra de Marín.
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Al final de la audiencia, a Marín le permitieron amamantar a su hija de 11 años y llorando relató que con López “habíamos tenido tres mediaciones y en una estuvo preso porque me golpeó, y yo le había ido a poner como cinco denuncias porque él llegaba, me arrancaba las puertas de mi casa, se me metía, me hacía zanganadas”.
“Cuando tenía 27 días de haber parido a la niña me golpeó y yo llegué con mi hija tierna a poner una denuncia y él que me decía ‘a mí no me van a agarrar, los policías a mí me valen’, y siempre me hacía desastres en mi casa, incluso el comisionado de Sébaco llegó a tomarle fotos a mi casa donde (López) me arrancó las verjas, las puertas y ni aun así lo detuvieron”, agregó la acusada.
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En su relato, la mujer señaló que “yo le decía: ‘solo pasale a la niña y a mí déjame en paz’, entonces él ‘ni después de muerto te voy a dejar en paz’, me decía”.
Encuentra a su pareja tomando
Marín y su sobrina, Arlen Blanco Treminio, contaron detalles diferentes a los señalados por la Fiscalía en la acusación.
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La noche del 8 de noviembre, según las mujeres, Marín estuvo en el cumpleaños de “una amiga”, pero al volver a su casa, encontró a López tomando. Pero él se fue en una mototaxi —con la que se dedica al transporte urbano en Sébaco— y cuando volvió comenzaron a discutir por la leche y los pañales para la niña.
“Él no me daba nada, no tengo luz en mi casa y estaba con una candelita prendida, cuando iba a acostar a la niña y se dio eso”, contó Marín.