En medio de la crisis sociopolítica del país, el Instituto Nacional Tecnológico (Inatec) se gastó un millón treinta y ocho mil setecientos ochenta córdobas en servicio de alquiler de salones y alimentación para el segundo festival hackathon Nicaragua 2018, que hizo efectivo por medio de una contratación simplificada, cuando la que debió utilizar era una contratación selectiva, explicó Dayra Valle, subdirectora del Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (Ieepp).
El hackaton es un evento tecnológico donde se exponen proyectos innovadores, incluidas la creación de aplicaciones.
El régimen orteguista desarrolló el evento el 29 y 30 de noviembre. Según publicaciones de medios oficialistas, hubo treinta proyectos participantes.
Valle destacó que la Ley 737, Ley de Contrataciones Administrativas del Sector Público, establece que debe aplicarse la licitación selectiva cuando los montos que van a cubrirse comprenden desde quinientos mil hasta tres millones de córdobas; lo que abarca el gasto que hizo el Inatec.
Existe un error del procedimiento, explicó Valle, ya que la contratación selectiva se apega a los principios de publicidad, transparencia y libre competencia, mientras que la simplificada corresponde a un proceso excepcional, que solo se hace bajo ciertas circunstancias, y ninguna corresponde con el caso del Inatec.
Por otro lado, el integrante de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, Ernesto Medina, expresó que le sorprende este tipo de gasto por parte del Inatec y aún más cuando el sector educativo ha sido afectado por la crisis.
Considera que si el Inatec cuenta con esos recursos debería de dedicarlos a revisar su oferta académica y a mejorar la calidad de sus programas y no en ese tipo de actividades.
Valoró que en condiciones normales, este caso implicaría una revisión por parte de la Contraloría General de la República, la cual es “ciega, sorda y muda con este gobierno”, ya que el presupuesto de las instituciones deriva de los impuestos.
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Aparentan su propio país
El régimen orteguista se ha encargado de borrar cualquier huella de la lucha cívica, y esto ha implicado una estrategia de realizar múltiples actividades culturales para aparentar “la normalidad” del país, pese a que la Policía Orteguista (PO) mantiene la persecución y las detenciones ilegales contra la ciudadanía.
En este sentido, la realización del segundo festival hackathon Nicaragua 2018, que costó más de un millón de córdobas, corresponde con la orientación de aparentar que todo está normal, valoró el integrante de la Alianza Cívica por la Justicia y Democracia, Ernesto Medina. “Este es un ejemplo más de hacer cosas y quererlas explicar con un absurdo cuando todos sabemos que el trasfondo de todo esto es la intención de querer aparentar que todo está normal, cuando nada está normal”, dijo.