Aunque Adolfo Matamoros construyó un nombre de respeto en el beisbol con Chinandega, será con los Leones que dará el hit mil de su carrera.
El receptor leonés, que va a su temporada 20 en los campeonatos nacionales de beisbol, se ganó un lugar en la historia con el poder y la puntería de su brazo para atrapar corredores. Sin embargo, pretende que su legado sea más grande y busca 39 imparables que lo separan de los mil y que lo convertirán en apenas el quinto enmascarado con esta marca, uniéndose a Marlon Abea, Julio Vallejos, Sergio Mena y Juan Blandón.
El año pasado no encontró el chance de jugar, purgado de Chinandega, en donde dejó sus mejores años, pero ahora que Sandor Guido es el mánager de los felinos, lo llevó de regreso a casa.
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“Matamoros va a tener la oportunidad de cerrar con brillo su carrera, al llegar a los mil hits. Todos sabemos la calidad de recetor que ha sido y nos ayudará a formar a los relevos en esta posición”, apuntó Sandor, quien ha despuntado con enorme éxito como estratega.
Y en efecto, Matamoros lo que desea es llegar a los mil hits, para luego dedicarse a entrenar y debe ser un bien valioso porque es un experto en la posición más difícil del juego.
Matamoros debutó en la Primera División en 1996 con León, pero debido a que estaba bloqueado ante la imponente presencia de Julio Vallejos como receptor titular, se marchó a Chinandega en 1999 y ahí entregó sus mejores años como pelotero.
Ya debería estar en el club de bateador de mil imparables, pero entre 2005 y 2008 no jugó permanentemente en Nicaragua, debido a que lo también hizo en la Liga Italiana de Beisbol.
Pendientes
Los Leones dieron a conocer una nómina preliminar, en la cual no están Wilton López y Arnol Rizo.
De acuerdo con el mánager Sandor Guido, Wilton desea prepararse mejor y se unirá al club más adelante, mientras que Rizo debe atender un asunto personal en Estados Unidos y quizá después podría integrarse.