El autoconvocado Kaled Antonio Toruño Maradiaga, cumplió sus 40 años, este primero de abril como preso político en el Sistema Penitenciario de Chinandega, aunque ahora el orteguismo lo quiere hacer ver como preso común para no dejarlo en libertad durante las negociaciones entre la Alianza Cívica y el régimen de Daniel Ortega.
Este es el tercer caso de autoconvocados, que el orteguismo quiere hacer pasar como reos comunes, y de esta manera no sacarlos en libertad y disminuir su lista de presos políticos, denunció la Unión de Presos Políticos Nicaragüenses (UPPN).
LA PRENSA/ CORTESÍA
Los otros casos son el de los blufileños Brandon Lovo y Glen Slate condenados por el asesinato del periodista Ángel Gahona durante las protestas cívicas en el caribe. Esta semana a ambos los movieron a galerías multiusos donde están los reos comunes, denunció la UPPN, aunque su abogado Maynor Curtis dice que están en lista conciliada entre la Alianza Cívica y el orteguismo.
También está el caso de Ryan Santamaria, Alexander Conde, Frederic Vega y Wilmer Mendoza, originarios de Ciudad Darío, condenados por robo agravado y portación ilegal de arma de fuego, cuando en realidad lo que hacían era repartir alimentos a la gente que estaba en los distintos tranques. Estos fueron trasladados a la Galería 1 alta donde están reos comunes.
Caso Toruño en Nagarote
LA PRENSA/ U. MOLINA
Kaled Toruño es originario de Nagarote, es activista político desde el 2012, forma parte del Movimiento Oposición Juventud Patriótica Nicaragüense, desde donde promovió una huelga de hambre frente a la departamental del Consejo Supremo Electoral de Estelí demandando cambio de funcionarios en ese poder del Estado. Además, no falló en los miércoles de protesta frente a esta institución en Managua, en el 2014.
Ahora en el contexto de las protestas cívicas contra el régimen, que iniciaron fuertemente el 18 de abril de 2018, participó activamente en marchas, plantones y tranques. Esta situación fue aprovechada por los militantes del partido Frente Sandinista de Nagarote, quienes ya lo asediaban para capturarlo, procesarlo y condenarlo ilegalmente a cinco años y seis meses de cárcel por un supuesto robo agravado.
La familia de Toruño es humilde y no logró ponerle una defensa privada durante el juicio y fue mal defendido por una defensora pública pagada por el Estado. Ahora está a la espera de audiencia de apelación en el tribunal de León, porque este 22 de marzo pasado se la suspendieron a como lo han hecho en todos los casos políticos.
Capturado por paramilitares
Según sus familiares, el activista político fue capturado por paramilitares junto a militantes del Frente Sandinista, el 5 de agosto de 2018 a eso de las 4:30 pm, por el sector del parque central de Nagarote. Este andaba trabajando como conductor de bicitaxi, pues es egresado de la carrera de derecho, pero no ha defendido según sus amistades.
“Pasó como ocho días desaparecido, la policía no daba razón de él. Fue hasta el 13 de agosto que apareció acusado en el Juzgado Segundo Distrito Penal de Juicio de León por robo agravado de 300 córdoba a un hombre de Nagarote, imagínese cuánto invento”, relató la familiar.
Según acusación fabricada por el Ministerio Público, el primero de agosto de 2018, el acusado Toruño se encontró con la presunta víctima Manuel Hernández González, por el sector de la biblioteca municipal a eso de las 8:30 pm y le dijo: “así te quería agarrar hijue…” y le dio un golpe en el hombro, sacó un cuchillo y le sacó de la billetera 300 córdoba y le quitó una comida.
De estos presuntos hechos no hay testigo, la víctima según la Fiscalía le contó a dos vigilantes de la alcaldía de Nagarote, quienes fueron testigos de oída en el juicio, junto a dos policías que supuestamente participaron en la detención del autoconvocado.
“Todo es falso, la víctima no llegó al juicio y los testigos fueron dos trabajadores de la alcaldía y dos policías que ni siquiera lo capturaron. Es un montaje para sacarlo de las calles y deje de protestar”, dijo una amistad, que prefieren omitir sus nombres por el temor al asedio de comités de barrio del Frente.
Juez condena sin víctima
Los únicos testigos en el juicio contra Kaled Toruño Maradiaga, fueron Pedro Gómez Moya y William Sánchez Gómez, vigilantes de la alcaldía de Nagarote, quienes son testigos de oídas porque la supuesta víctima les contó, pero no vieron nada. Los otros dos testigos son policías que supuestamente lo capturaron en actitud sospechosa y le encontraron un cuchillo con el que presuntamente amenazó a la víctima para robarle 300 córdoba, según acusación fiscal.
A pesar que fue detenido ilegalmente por paramilitares, acusado después de las 48 horas legales ante un juez y no hubo víctima ni prueba en su contra, la juez orteguista Aleyda García Carrillo lo condenó a cinco años y seis meses de prisión.
La sentencia fue emitida el 12 de octubre de 2018, la cual fue apelada, pero está a la espera de audiencia en el tribunal de apelaciones de León.
Kaled Toruño es el número 461 de la lista de Desaparecidos y Presos Políticos del Comité de Presos Políticos, pero ahora la familia y amistades denuncian que no lo quieren ver como preso político sino como reo común.
En julio de 2012 Luis Herrera y Kaled Antonio Toruño Maradiaga, del movimiento de oposición Juventud Patriótica Nicaragüense, denunciaron ante la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) que eran víctimas de acoso y amenazas por parte de grupos afines al partido de gobierno y de la Alcaldía de Nagarote.