Cuando parecía apagarse, Cheslor Cuthbert demostró que la llama sigue viva, al coleccionar un sencillo, doble y un jonrón, con cuatro carreras empujadas, para subir a .307 en la derrota de los Royals de Kansas City 8-7 ante los Mellizos de Minnesota, este viernes.
Cheslor conectó un doblete que remolcó a Jorge Soler en el tercer episodio para romper el hielo en el juego, y luego con la pizarra 3-3, se voló la cerca en el quinto, con un Whit Merrifield y Nicky López a bordo. Y cerró con un sencillo en el octavo. Solo falló una vez en el juego y le faltó el triple para batear el ciclo.
El costeño empató su marca de hits y carreras empujadas en un partido de las Grandes Ligas. Por tercera vez produce cuatro. La primera fue el 2 de septiembre del 2015 contra Detroit y lo repitió el 29 de abril de 2018 frente a los Medias Blancas. Y por novena vez dispara tres incogibles.
Al irse de 4-3, subió a .307 (75-23), con 15 carreras remolcados en 19 partidos, para una tremenda frecuencia y explican porque sigue en el line-up titular de los Royals aunque ya regresó de la lista de lesionados el tercera base Hunter Dozier. Ahora el nica está jugando en la inicial.
El jonrón de Cheslor fue una línea bestial por el jardín izquierdo ante una recta cortada de 89.5 millas por hora del zurdo Martín Pérez. El batazo salió con velocidad de 108.6 millas, el más duro que ha dado el pinolero este año y probablemente de su carrera.