El Senado de Estados Unidos, controlado por los republicanos, rechazó el martes tres esfuerzos demócratas para obtener documentos y pruebas en el juicio de destitución del presidente Donald Trump, una señal temprana de que el procedimiento podría avanzar en una línea favorable a Trump.
Cuando el tercer juicio político en la historia de Estados Unidos comenzó en serio, los senadores votaron 53-47 siguiendo las líneas partidistas para bloquear tres mociones separadas del líder demócrata Chuck Schumer para que se solicitara que se presenten archivos y documentos de la Casa Blanca, el Departamento de Estado y la Oficina de Administración y Presupuesto relacionados con los tratos de Trump con Ucrania.
Después de la tercera votación, Schumer presentó una moción en busca del testimonio del Jefe de Gabinete interino de la Casa Blanca, Mick Mulvaney.
Los demócratas han pedido al Senado que retire a Trump de su cargo por presionar a Ucrania para que investigue al ex vicepresidente demócrata Joe Biden, un rival político, y luego impida la investigación sobre el asunto.
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Trump, quien fue acusado el mes pasado por la Cámara de Representantes liderada por los demócratas por cargos de abuso de poder y obstrucción del Congreso, niega haber actuado mal y describe su juicio político como un engaño partidista para descarrilar su candidatura de reelección de 2020.
Durante el debate inicial, el principal defensor legal de Trump atacó el caso como infundado y un importante legislador demócrata dijo que había evidencia “abrumadora” de irregularidades.
Con las cámaras de televisión en movimiento, el presidente del tribunal estadounidense, John Roberts, convocó el proceso y las dos partes comenzaron a discutir sobre las reglas propuestas para el juicio del líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell.
El abogado de la Casa Blanca, Pat Cipollone, quien lidera la defensa de Trump, atacó los fundamentos de los cargos contra el presidente republicano y dijo que los demócratas no habían estado cerca de cumplir con el estándar de destitución de la Constitución de los Estados Unidos.
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“La única conclusión será que el presidente no ha hecho absolutamente nada malo”, dijo Cipollone mientras argumentaba a favor de la propuesta de McConnell de decidir si permitiría más testigos o documentos más adelante en el juicio.”No hay absolutamente ningún caso”, dijo.
Demócratas buscan testimonio
El representante demócrata Adam Schiff, quien ayudó a encabezar la investigación de juicio político de la Cámara de Representantes, resumió los cargos contra Trump y dijo que el presidente había cometido “mala conducta constitucional que justifica el juicio político”.
Schiff dijo que aunque la evidencia en contra de Trump “ya era abrumadora”, se necesitaban más testimonios de testigos para mostrar el alcance total de la mala conducta del presidente y de quienes lo rodean.
Los demócratas quieren que testifiquen varios funcionarios actuales y anteriores de la administración Trump, incluido el ex asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton.
A pesar de todos los insultos y señalamientos del abogado del presidente, no escuchamos un solo argumento sobre los méritos de por qué no deberían presentarse los documentos y testigos que solicitamos en este juicio”, dijo Schumer.
Los senadores republicanos no han descartado la posibilidad de más testimonios y pruebas de los testigos, con probables votos más tarde en el juicio después de días de abrir argumentos y preguntas de los senadores.
McConnell dio a conocer un plan el lunes para lo que sería un juicio potencialmente rápido sin nuevos testimonios o pruebas. Les habría dado a los fiscales demócratas y a los abogados de Trump 48 horas, divididas equitativamente, para presentar sus argumentos durante cuatro días.
Ese plan fue cambiado para dar a cada lado tres días para presentar argumentos iniciales. Las reglas también permitirán que los archivos de la Cámara de Representantes sobre la investigación de juicio político sean admitido como evidencia en el juicio, como habían exigido los demócratas.
Los demócratas acusaron a McConnell de tratar de manipular un juicio con las reglas propuestas que, según dijeron, evitarían que los testigos testificaran y prohibirían la evidencia reunida por los investigadores. McConnell ha dicho repetidamente que las reglas reflejarían las utilizadas en la destitución de 1999 del entonces presidente Bill Clinton, un demócrata.
Según el plan de McConnell, los abogados de Trump podrían avanzar al inicio del proceso para pedir a los senadores que desestimen todos los cargos, según un asistente de liderazgo republicano de alto rango, una moción que probablemente no alcanzaría el apoyo necesario para tener éxito.
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Incluso si tal moción falla, es casi seguro que Trump será absuelto por la cámara de 100 miembros, donde se necesita una mayoría de dos tercios para destituirlo de su cargo.
Pero el impacto del juicio en su intento de reelección en noviembre está lejos de ser claro.
Firme apoyo a Trump
Los demócratas acusan a Trump de presionar a Ucrania, un aliado vulnerable, para interferir en las elecciones estadounidenses a expensas de la seguridad nacional estadounidense y dicen que es un peligro para la democracia estadounidense.
Trump y su equipo legal dicen que no hubo presión y que el caso de los demócratas se basa en rumores. Cipollone describió la investigación de Ucrania como un intento ilegal de destituir a un presidente elegido democráticamente y evitar su reelección.
“No están aquí para robar una elección, están aquí para robar dos elecciones”, dijo Cipollone.
El equipo de defensa de la Casa Blanca también repitió algunos cargos falsos. Cipollone dijo que los republicanos fueron excluidos de la instalación segura donde tuvieron lugar las deposiciones iniciales para las audiencias de juicio político, cuando los miembros republicanos del Comité de Inteligencia de la Cámara no solo estuvieron presentes sino que interrogaron a los testigos.
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El abogado de Trump, Jay Sekulow, dijo que a la Casa Blanca no se le permitió tener un abogado presente durante las audiencias de juicio político, cuando en realidad se negó a participar.
Se espera que el juicio en el Senado continúe seis días a la semana, de lunes a sábado, al menos hasta finales de enero.
Trump ha tratado de recabar más apoyo de su base con el problema de la acusación, recaudando fondos. En ruidosas manifestaciones electorales, se ha pintado como la víctima de una cacería de brujas.
El testimonio televisado del Congreso de un desfile de funcionarios actuales y anteriores que hablaron de un esfuerzo coordinado para presionar a Ucrania a investigar a los Biden ha hecho poco para cambiar el apoyo a favor y en contra de la acusación de Trump. Las encuestas de Reuters / Ipsos desde que comenzó la investigación muestran que los demócratas y los republicanos respondieron en gran medida siguiendo las líneas de sus partidos.
Mercados ignoran proceso en el Congreso
Los mercados financieros han ignorado el juicio político, y las revelaciones en la investigación de meses han hecho poco para impulsar el sentimiento anti-Trump entre los votantes indecisos o alejar a los votantes republicanos moderados.
Ningún presidente ha sido removido por un proceso de destitución, un mecanismo que los fundadores de la nación, preocupados por un monarca en suelo estadounidense, idearon para expulsar a un presidente por “traición, soborno u otros delitos y delitos menores”.
Un evento crucial en el caso de juicio político es una llamada telefónica del 25 de julio en la que Trump le pidió al presidente ucraniano Volodymyr Zelenskiy que investigara los Biden y una teoría desacreditada de que Ucrania, no Rusia, interfirió en las elecciones estadounidenses de 2016.
Hunter Biden se había unido al consejo de la compañía energética ucraniana Burisma mientras su padre era vicepresidente. Trump ha acusado a los Biden de corrupción sin ofrecer evidencia. Ellos han negado haber actuado mal.
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Los demócratas dijeron que Trump abusó de su poder al retener inicialmente $ 391 millones en la ayuda de seguridad de Ucrania destinada a luchar contra los separatistas respaldados por Rusia, y una codiciada reunión de la Casa Blanca para Zelenskiy, para presionar a Ucrania a anunciar las investigaciones de los Biden. El equipo legal de Trump dice que no hay evidencia de que la ayuda fuera una condición para recibir asistencia.
La obstrucción de los cargos del Congreso se relaciona con que Trump ordenó a los funcionarios y agencias de la administración que no cumplan con las citaciones de la Cámara para testimonios y documentos relacionados con la destitución.