Corría el año 2006 y Alexis Argüello seguía de cerca la carrera de Román González. Que se convirtiera en campeón mundial era prácticamente un asunto personal del ídolo nicaragüense. En esa ocasión Chocolatito peleó por vez primera un título internacional para ser ranqueado en la división de las 105 libras. Enfrentó a Oscar Murillo en el Casino Pharaohs, ganando por nocaut y haciéndose dueño del título Fedecentro de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y campeón nacional. Ahí Gilberto Mendoza Jr. presidente de la AMB, le prometió al Flaco Explosivo que lo cuidaría, unas palabras que todavía Mendoza no olvida y hasta el momento ha cumplido.
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“¡Bienvenido a casa Chocolatito! En 2006 Alexis Argüello me dijo que te cuidara que ibas a ser un gran campeón. Ganaste tu primer título en la AMB en 2008 y el segundo en 2011. Seguiste tu camino y aquí estás de nuevo. ¡Felicidades!”, escribió el presidente del organismo mundial en su cuenta de Twitter. Chocolatito decidió separarse de la AMB en 2014 cuando derrotó a Akira Yaegashi y le arrebató su cetro de las 112 libras, desde ese momento pasó a ser peleador del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y dejó de serlo en 2017 tras el nocaut con Rungvisai.
Mendoza se saltó varias reglas del organismo para colocar a Román González entre los primeros puestos del ranking de las 115 libras y así tener derecho de enfrentar a Khalid Yafai. Fue tan evidente la decisión que el retador mandatorio, el australiano Andrew Moloney, envió una carta quejándose al organismo por beneficiar al nicaragüense.