Juana Mendoza de 74 años de edad lleva celebrando la Purísima Concepción de María durante más de 30 años. Nada la ha detenido para dar lo que considera una ofrenda de fe, ni la crisis sociopolítica de 2018 le impidió celebrar la tradicional gritería el 7 de diciembre. Pero con la orientación de la Arquidiócesis de Managua de celebrar la novena en un «ambiente familiar», Mendoza refiere que por el cuidado de ella y su familia, por primera vez no esperará a partir de las seis de la tarde a los devotos que con pandero y guitarra en manos recorren la capital para cantar a la Concepción de María.
La fiel devota relató a LA PRENSA que a diferencia de años anteriores «por recomendación de los sacerdotes» va a celebrar la Purísima en familia y que el dinero que se ahorre en el tradicional «brindis» o gorra, lo ocupará para ayudar a los más necesitados. Si bien la Purísima la va a celebrar entre personas cercanas, doña Juana establecerá un protocolo de bioseguridad ante el Covid-19.
«Siempre la voy a celebrar el 7 de diciembre, pero solo con mi familia. Yo tengo de celebrarla lo que tiene uno de mis hijos, 36 años. Lo que haré en esta ocasión es poner un balde con agua y cloro para desinfectar los zapatos de mis familiares que vayan entrando, igual voy a echar alcohol en las manos. Tienen que venir con sus mascarillas. El altar siempre lo pongo en el porche, pero en este año, por el espacio, lo pondré en la sala. Es primera vez que la hago familiar», expresó doña Juana.
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Si bien el llamado de la Iglesia católica no es cancelar la tradicional gritería, recomienda enfáticamente a evitar aglomeraciones y celebrarla en un ambiente familiar, y en caso de visitar los templos o instalar altares sugiere «reducir el tiempo de visita a los mismos». En Managua y otros departamentos los devotos acostumbran visitar los diferentes hogares y cantar a la imagen, incluso por más de diez minutos, lo que en el contexto actual de la pandemia acelera el riesgo de contagio.
Lo que sí debemos de estar claros es que no habrá forma de evitar que algunas familias decidan celebrar la Purísima, ni que la gente salga con su mochila o saco a gritarla. Prueba de ello fue la celebración a Santo Domingo de Guzmán, que a pesar de que la Iglesia canceló la festividad, los devotos afines al régimen de Daniel Ortega hicieron el recorrido con una réplica de la diminuta imagen.
Al respecto el infectólogo Carlos Quant considera que en términos generales los feligreses de la Iglesia católica han sabido atender las orientaciones brindadas por sus autoridades eclesiásticas, pero que hay un grupo de personas simpatizantes del régimen que buscan vender una falsa normalidad y así contravenir la decisión de la Arquidiócesis de Managua. «Tiene que ver mucho con cierto fanatismo político y no tanto religioso».
¿Piensa celebrar la Purísima?
Si usted es un devoto fiel a sus tradiciones y no va a acatar las orientaciones de la Iglesia católica, y va a celebrar la gritería o salir a cantarle a la Virgen, tiene que tomar en cuenta una serie de recomendaciones que pueden disminuir el riesgo de contagio. Para el doctor Quant la principal sugerencia es respetar la decisión de los pastores «que buscan el bienestar de las familias».
El infectólogo recomienda a quienes salgan a gritar a portar en todo momento su recipiente de alcohol gel o liquido, ya que no tiene la oportunidad de lavarse las manos. Otra sugerencia es hacer uso obligatorio de mascarillas o careta facial. «Es importante porque normalmente la gente canta y sabemos que hablar, cantar, gritar es un factor de riesgo de transmisión del virus».
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La doctora Josefina Bonilla, médica y salubrista del Comité Científico Multidisciplinario (CCM) también ve prudente seguir la orientación de la Arquidiócesis de Managua, si es posible ampliar la celebración de forma virtual. «La Gritería virtual sería una novedad muy segura para su salud y su vida. Despierte la creatividad nicaragüense y prográmela así. Será un excelente recuerdo y estará feliz de no dejar la devoción y hacerlo diferente», recomienda la especialista.
Si celebra la Purísima en su casa
La salubrista enfatiza que lejos de la devoción tanto los organizadores de eventos en sus casas como asistentes «deben continuar en todo tiempo cuidándose. El coronavirus no descansa, no duerme, sigue buscando el descuido de las personas para contagiar, para saltar de una persona a otra y atacar al organismo humano». Al respecto la doctora Bonilla recomienda:
- 1- Instale el altar en ambiente abierto, al aire libre. Nunca en cuarto sin ventilación. No colocar sillas para evitar la permanencia por mucho tiempo de las personas visitantes.
- 2- Reciba grupos de visita de forma programada, en horario diurno escalonado. Cada grupo de menos de diez personas, en diferentes horarios.
- 3- En la invitación, divulgue las normas de prevención del contagio y asegúrese que quienes llegan las cumplen.
- 4- Establezca una breve visita al altar, con distanciamiento de dos metros de una persona a otra y usando mascarillas al rezar y cantar.
- 5- Si quiere entregar un obsequio por la visita, que sea de utilidad práctica para llevar a casa. No para quedarse consumiendo en el lugar. Evite las estancias largas de los visitantes.
Si sale a la Gritería
- 1- Vaya donde no hay desorden ni “molote” (acumulación numerosa de personas), donde estén controlando la entrada.
- 2- Use siempre mascarilla y protector facial.
- 3- Cargue alcohol y úselo cada vez que lo requiera.
- 4- Vaya solo a dos o tres altares. Venza la tentación de ir a otros lugares alejados de su zona.
- 5- No consuma alimentos en la calle para no retirar mascarilla. Si le ofrecen alimentos, llévelos a casa.
- 6- Si está cuidando a un niño, explique bien sus normas para cuidarse y vigile que cumpla.
- 7- Evite rozarse con la gente en las calles y no contribuya al orden. Dedíquese a su devoción.
- 8- Regrese pronto a casa, lávese las manos para evitar introducir el virus a su hogar. Si le es posible, procure darse un baño y lavar o colocar la ropa que usó en una bolsa para lavarla por separado luego.
Desinfectar el brindis
El infectólogo explica que todo objeto u alimento puede estar contaminado y eso representa un riesgo. En Nicaragua algunos devotos acostumbran a degustar de inmediato algún alimento recibido como brindis. Respecto a esto el especialista recomienda a los que reparten la gorra hacerlo con todas las medidas de precaución para evitar la contaminación de estos objetos y los que los reciben el brindis ocupar algún «pañito», y desinfectarlo antes de llevárselo a la boca.