La entrada de la canícula en Nicaragua, un periodo que se caracteriza por un veranillo corto y que es aprovechado por los productores para secar granos básicos, tendrá un comportamiento mixto este año, debido al ingreso de ondas tropicales que ocasionarán aguaceros en todo el territorio nacional.
También el lapso de canícula no se verá afectado por el ingreso tardío del invierno en el país, el cual tuvo casi un mes de retraso. Se espera que dicho fenómeno se establezca desde el 15 de julio hasta el 15 de agosto.
Según el pronóstico de Agustín Moreira, agrometeorólogo y director del Observatorio de Fenómenos Naturales (Ofena), durante el periodo canicular se tendrá un comportamiento mixto, “en cual vamos a tener presencia de afectaciones por causas de algunas ondas tropicales y sistemas de baja presión que van a afectar el territorio nacional”.
Este comportamiento significa que el periodo canicular no va a ser totalmente seco, sino que algunos días estará combinado con lluvias.
Además, Moreira indicó que la entrada tardía del invierno a territorio nacional no influirá en la canícula: “El lapso se mantiene siempre porque eso es algo natural. Sobre su comportamiento, lo que sucede es que tiene condiciones bastante inestables debido a la situación climática que estamos viviendo. Estamos teniendo bastante severidad con los cambios climáticos que se están generando actualmente”.
A criterio del especialista, este comportamiento no afectaría a los productores agrícolas. “Las afectaciones ya las tuvimos con relación a las pocas incidencias de lluvias que se vieron a principio de mayo y junio. Esperemos que esto se vaya normalizando en el periodo de julio”, acotó.
Asimismo, explicó que hay zonas en que ya está lloviendo, como la zona del Norte, Caribe Sur, Centro Sur y el Pacífico Sur. “Hemos tenido ahora déficit de lluvia en la zona de Occidente, donde la canícula es más predominante. La canícula no afecta a todo el territorio nacional, afecta principalmente el Corredor Seco”.
Productores se encuentran a la espera
Julio Munguía, gerente técnico de la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (Upanic), compartió que actualmente los productores continúan con sus labores correspondientes y a la espera de cómo se comporte la canícula este año.
“En las zonas donde ha llovido están esperando ese periodo intermedio para seguir haciendo sus labores de cultivo. En los lugares donde no ha llovido muy frecuentemente sí están a la espera o la expectativa de que la canícula pueda ser un poco no tan fuerte como en otros momentos”, aseguró.
Le puede interesar: A las puertas del ciclo agrícola 2021-2022, todo lo que deben saber los productores en Nicaragua sobre el próximo invierno
Siguiendo esta línea, explicó que en ocasiones hay señales en el campo para conocer o prever la canícula. “Son aquellos lugares en donde se presentan fuertes vientos y está un poco soleado. Uno percibe el cambio de clima que hay, porque los vientos son frescos pero ausentes completamente de nubosidad. Entonces esas son como pequeñas señales de que puede entrar el periodo canicular”.
“En algunos lugares, el llamado veranillo de San Juan no fue tan fuerte, entonces están esperando cómo se va a comportar la canícula. Lo que pasa es que estos fenómenos naturales, por efectos del cambio climático, tienden a ser muy diversos. De todas formas (los productores) están siempre preparados para cualquier ámbito, ya sea la falta o la presencia de la canícula”, agregó.
Lea además: Ciclo agrícola de Nicaragua favorecido con un buen invierno, pero no hay suficiente financiamiento
Además, indicó que por la falta de precipitación algunos productores se preparan con abonos foliares para proporcionarle humedad a la planta. “Otros recurren a la cosecha de agua, que recolectan de las precipitaciones y con eso hacen alguna actividad o alguna preparación para enfrentar ese periodo seco”, afirmó.