El agua de la laguna volcánica de Asososca, ubicada en la zona Sur de la capital, comenzó a tornarse de color verde celeste y emana un olor a sulfuro, debido a que desde este martes 4 de enero se empezó a manifestar el fenómeno conocido como «volteo térmico», según informaron a los medios oficialistas las autoridades de la Empresa Nicaragüense de Acueductos y Alcantarillados (Enacal).
Asososca es una laguna que abastece de agua potable a unos 30 barrios aledaños ubicados en los distritos 2 y 3 de la capital, y, según Enacal, hasta el momento el comportamiento del fenómeno es parcial, lo que significa que aún no afecta el corte del suministro de agua en dicha zona.
Los expertos agregaron que, en caso de que el volteo térmico se vuelva más intenso, el bombeo de agua de la laguna quedaría fuera de operación, dejando a miles de capitalinos sin el acceso al vital líquido.
«Estamos en permanente vigilancia y monitoreo ante cambios de color, sabor y olor por encima de la norma, sobre todo en el sector cercano a los equipos de bombeo, para posible suspensión del servicio de agua», se lee en una publicación de los medios afines al gobierno.
Lea además: Asamblea Nacional aprueba decreto de préstamo millonario del BCIE para sanear el lago de Managua
Enacal agregó que de no darse ningún evento de mayor intensidad entre hoy, mañana o en los días sucesivos, «se podría continuar de forma parcial hasta desaparecer por completo», sin embargo la institución insistió en que mantendrá vigilancia y monitoreo constante al fenómeno natural.
Volteo térmico
En años anteriores expertos en el tema y la misma Enacal han explicado que por lo general el volteo térmico surge en los meses de noviembre y diciembre de cada año, cuando las aguas superficiales se enfrían debido a los vientos, chocan con las aguas profundas que se encuentran más calientes, y estas emergen a la superficie con sedimentos y mal olor.
En enero de 2021 la especialista en políticas públicas con énfasis en el sector agua y saneamiento en el ámbito urbano y rural, Ruth Selma Herrera, explicó a LA PRENSA que las aguas que están al fondo de la laguna son más cálidas y ante la carencia de oxígeno pueden contener también mucha materia orgánica como hojas, sedimentos u otros materiales que están en proceso de descomposición, y al experimentar ese volteo, «toda esa cantidad de residuo pasa a la superficie y obviamente se contamina y se revuelve», liberando gases que provocan que el líquido deje de ser apto para el consumo humano.
Siendo Asososca una de las más importantes fuentes de agua de Managua, sobre todo en la parte baja de Las Brisas hasta el barrio San José Oriental, la zona media desde Altagracia, subiendo por la Suburbana y llega hasta Metrocentro y la zona alta que va por la carretera sur, la experta señaló que es necesario que las autoridades orienten a la población cuándo van a suspender el servicio de agua, de manera que les permita prepararse con antelación.
«Esta laguna te da entre 12 y 14 millones de galones de agua por día, que abastece entre el 11 y 12 por ciento de la capital y puede ser hasta un máximo de 14 millones de galones por día”, siendo el desabastecimiento un efecto negativo en las zonas que reciben influencia de la laguna, destacó la fuente en dicho artículo periodístico.
La laguna de Asososca está ubicada a 2,2 kilómetros del lago Xolotlán o lago de Managua, y tiene un cráter de 800 metros de largo en dirección a la zona norte-sur y 1,100 metros en dirección al este-oeste del país, y tiene una profundida de 140 metros.